Necesito caminarllego hasta la Biblioteca Nacional
doblo
la Alameda se ha puesto un traje
de tarde eléctrica.
Necesito caminar
llego hasta el Parque Forestal
escucho
las campanas de San Francisco
jugando a campanear.
Son las siete de la tarde
y a nadie encontré,
¿será que a nadie a mi paso miré?
Necesito descansar
entro a la fría Catedral
busco
un rinconcito para echar mis huesos
y ponerme a pensar.
Lejos, cerca, quizás donde
se encuentra ese mar,
se encuentra el agüita
que me ha de regar.
¿Será porque a nadie a mi paso miré?
¿será porque dentro de mí no busqué?
.
Fotografía de Ian Welden. Santiago de Chile 1993.
Será porque muchas veces vamos dormidos.
ResponderBorrarBuen poema.
Saludos cordiales.
Te acompañé en este paseo pero te dejé en la catedral para que en el silencio busques dentro y luego, fuera, sonrías.
ResponderBorrarBesos
bellisimas y profundas letras nos regalas magno y sensible poeta, esta asturiana te da infinitas gracias por concedernos el honor de ser testigos de ellas y te manda un besin muy muy grande.
ResponderBorrarRincones para recordar
ResponderBorrarpara buscar ese momento íntimo
que nos indique hacia
donde caminar.
Es un placer
pasear entre tus letras.
Un beso
Ay mi querido Ian, a veces nos olvidamos de buscar precisamente allí, donde están las respuestas...tus letras de hoy, ántimas de vida y Santiago, TU SANTIAGO, latiendo en tu alma.
ResponderBorrarHermoso lo que te ha puesto Melba, hermoso y real, fuiste creado con los dones precisos para crear, crear y amar a la humanidad sedienta de ternura.
Un abrazote grande, artista de sueños.
Todo un recorrido, que puede ser real, efectivamente caminado o imaginario..En la mente uno vuelve a andar por esas calles por las que se anduvo tanto tiempo atras, solo, solitario, porque asi se eligió o porque como decis ahi, no se miró a nadie ni se encontró a nadie. Abrazos!
ResponderBorrarSerá cuestión que empieces a mirar Ian!
ResponderBorrarUn beso o 2 *
Los recuerdos nos van dejando solos..y nuestra andadura es mas virtual que real..la realidad nos despierta con su áspera verdad
ResponderBorrarsaludos desde el sur
Cuando la nostalgia por la tierra clama su cuota de recuerdos, la pluma se hace ágil en el verso y en la rima.
ResponderBorrarHermoso, Ian, tu tierra ha cruzado el mar para visitarte.
Muchas gracias por tus alentadoras palabras, es un gusto recibirte en Bitácora.
Besos.
Ian, ¡qué dificil, a veces, encontrarse con uno mismo!.
ResponderBorrarHasta que no nos descubrimos a nosotros no llegamos a descubrir a los demás.
¡REFLEXIONEMOS!.
Un abrazo desde la cálida Andalucía.
¡Hola Ían Welden!
ResponderBorrarTus letras hoy quizá un pelín melancólicas, pero siempre interesantes. La vida es una búsqueda continua... la nostalgia hiere el alma y la tuya se ve sensible.
Todos necesitamos caminar aunque a veces no sabemos con certeza cual es la mejor dirección.
Me gusta todo, pero me encanta este final...
Lejos, cerca, quizás donde
se encuentra ese mar,
se encuentra el agüita
que me ha de regar.
Será porque a nadie a mi paso miré?
será porque dentro de mi no busqué?
Es fantástico! Enhorabuena. Te dejo un abrazo de agradecimiento y estima. Que Dios te bendiga
Pues fugaz es que llego yo a este rinconcito en Dinamarca, con nostalgias chilenas...
ResponderBorrarSabes, tengo familia chilena, viven en Santiago y yo he estado allí, así que me ha emocionado este poema tuyo!
Y muchas gracias por tus acertados chapoteos cuando paseas por mi Orilla!
Un abrazo muy primaveral!
;)
Cuando se necesita caminar, pensar o estar, es que la búsqueda sigue en la firmeza de los que no nos conformamos con lo simple; al contrario necesitámos la veracidad del momento.
ResponderBorrarUn saludiño
Será que nuestros pasos se pierden en un atardecer de nostalgias?
ResponderBorrarBesos, Ian.
Santiago está tan lindo Ian.
ResponderBorrarPero es Otoño y todo esta medio gris, la contaminación hace estragos YA! y la semana pasada hubo un incendio en la pre cordillera cerca de mi casa...todo estaba lleno de humo...pero ya paso.
Y yo amo el VERANO.
Besos para ti.
mar