"Si nada nos salva de la muerte
al menos que el amor nos salve de la vida".
Pablo Neruda.
Con la ceguera mortal de Río Mapocho
cuando va de paso por el Cajón del Arrayán
nos entregamos la promesa de complicidad total.
Como quien deposita una flor blanca
en el altar del Dios de la Verdad
ante todo seríamos amigos
porque la ventana absolutamente abierta
de la noble amistad
evitaría que nos devoráramos
ante nuestra propias narices.
Todo lo demás se daría por añadidura.
Pasaron los días del temor a tocarnos.
Encontramos el paraíso
en el laberinto de nuestros cuerpos.
Nos contamos los secretos más recónditos
de nuestras libidinosas naturalezas
y hoy nos enfrentamos el uno ante el otro
desnudos a no poder más
escudriñándonos nuestras almas
con recelo de gendarmes.
Pequeñas manitos, almas queridas, fotos familiares
de días felices y otros fantasmas
se precipitan sobre nuestras conciencias.
El Gran Dedo Índice combate a muerte
nuestra osadía sin precedentes
de abandonarlo todo por una pasión de porcelana.
La incógnita total del nuevo país blanco
cristaliza en la boca tu aliento.
En torno al amar o al no amar
giran nuestros dolorosos remolinos
y sobre nuestra piel revolotean los años.
Pero considerando todo lo aquí expuesto
y estando dispuestos a pesar de todo
a comprobar nuestra teoría del Viejo Mundo
¿de qué otra materia sino del verbo amar
se construye la idiosincracia de este edificio?
Composicion gráfica de Ian Welden. Copenhague 2012.
Poema escrito en Santiago de Chile en el año 1980.
Lugares comunes, idioma universal, distintos escenarios y paisajes, pero todo inmensamente nuestro, de todos.
ResponderBorrarHay quien lo recrea en poema y otros, en su recuerdo.
Besos
Qué bonito, Ian!! El amor siempre llenando nuestras páginas más silenciosas. El amor siempre concediendo el don de ser felices. El amor siempre envolviéndonos en un halo de paz y buenos sentimientos.
ResponderBorrarUn abrazo, corazón.
Que lindo poema con imágenes, sentimiento y camino recorrido.
ResponderBorrary esa linda complicidad.
Un abrazo Ian.
Gracias por visitar mi Jardín de bolsillo.
ResponderBorrarEl amor, ese gran desconocido al que cada uno ponemos un rostro es el protagonista de tus versos. Es un amor de piel y tacto, de miradas, de aromas...un concentrado de sentidos que se bebe con deleite
Un saludo
Entre contradicciones se balancea el amor ...al final como al principio, el amor no duda.
ResponderBorrarUn abrazo Ian.
Una maravilla realmente! Un placer leerte, abrazos miles.
ResponderBorrarFelices Pascuas.