Siempre se me ocurre buscarte
cuando no estás.
Y ocurre que no te encuentro
porque entre tanto delirio
te resulta fácil ocultarte
cual reina de la colmena
en los dulces recovecos
de la miel ajena.
Cuando no estás
no me siento como un hombre
soy más bien como un animal
que merodea por la noche
siguiendo por instinto el rastro
que debería guiarme a tu casa.
Cuando no te encuentro
se desbaratan las cosas
y caen confundidas desde el cielo
disfrazándote de ingenua aguja
sujetando entre tus manos poderosas
el gigantesco pajar de la distancia.
De mi "Poemario de amor, ausencias y distancias".
Publicado por REVISTA PÁGINA 1, José Pivin, Haifa.
http://pagina1-josepivin.blogspot.com/2011/12/pequeno-poemario-de-amor-ausencias-y.html
Sigue gustándome como la primera vez que lo leí.
ResponderBorrarBesos Ian
Aunque no esté, si sigue en su busca la hallará. Creo que si dejara de hacerlo ni él mismo se lo perdonaría.
ResponderBorrarAbrazos
Metáforas que buscan su encuentro con la realidad y por oposición huyen de ella como si no quisieran encontrarla. Bueno. Franziska
ResponderBorrarHay personas que son parte de nuestro Norte y si las perdemos estamos perdidos...
ResponderBorrarUn abrazo grandote.
Muy bueno. Un poema claro que nos muestra por dentro la soledad de buscar y confundirnos en ese intento.
ResponderBorrarmariarosa
Iam,esa "aguja,que sostiene el pajar de la distancia",sigue cosiendo tus sueños y esperanzas,aunque no la encuentres,amigo.Ella está muy dentro de ti y te acompaña por toda la eternidad.
ResponderBorrarMi felicitación y mi abrazo siempre,amigo.
M.Jesús