miércoles, 9 de febrero de 2011

LOS MACHOS DEL AMOR

Vengo del trabajo
colgado de un gancho.
Todos mis compadres
colgados de un gancho.
Y el autobús nos escupe
al llegar a la parada número trece,
parada triste y negra.
Caminamos eternos senderos
hacia nuestra población.
Adiós compadritos
hasta mañana en la fábrica!
Y nos dispersamos.
Sigo solo,
la policía me vigila
desde un siniestro coche blindado
y no hay más faroles de luz
en este peligroso sendero.
Mi instinto me conduce.
Huelo,
escucho,
tropiezo, caigo y desmayo.
Pierdo el conocimiento
con mi cara en el lodazal.
Pero yo soy
y yo despierto
y yo encuentro con mi olfato
cual perro guardián
mi territorio,
mi techo,
mi dulce hembra
y mis mujercitas y hombrecitos.
Traigo maíz aún húmedo,
papas recién desenterradas
y un pez con escamas de arcoiris.
Hacemos milagros en la olla
y después de cenar
nos acostamos todos juntos
en nuestra vieja cama comunitaria
a mirar las estrellas fugaces
a través de los orificios en el techo.
.
Arte visual "Los Compadres".
Ian Welden, Copenhague 2001.

.

12 comentarios:

  1. No sé si describes algo real o es ficticio. De una forma u otra, supongo que plasma una realidad, que sucedió demasiadas veces, a demasiada gente, en demasiados sitios.
    De todas formas, la esperanza aparece, aunque algo lejana,cabalgando sobre esa estrella fugaz.
    Gracias por sus comentarios.
    Un saludo.

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  2. por momentos me parecía escuchar una base de música rap y tus versos recitados.
    Muy bueno.

    saludos desde Montevideo.

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  3. Hola, Ian, tu poema describe la cruda realidad de los más desfavorecidos con un lenguaje poético que no por ello resta dramatismo.

    Un beso, querido amigo, mil gracias por tus visitas y disfruta mucho del fin de semana en tu gélido y hermoso país de adopción.

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  4. Bien dices
    y es admirable que tú estando tan lejos , sabes y sientes en tus ojos y tus manos lo que te une a tu gente de esta tierra , que si es cierto aún son muchos los que rastrojean por sobrevivir y no es mentira lo que digo ,pues así ocurre en las grandes ciudades...

    mis respetos!

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  5. Un poema con mucha fuerza, si me lo permites le agregaria a tus palabras, que es gente honesta por sobre todas las cosas, por eso se sienten felices con sus afectos, los que le dan el aire para seguir.

    Un beso.

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  6. Describen tus poemas con gran dramatismo las realidades de los mal llamados países pobres.
    Pero leerlo como tú sabes hacerlo tan poéticamente toma otro sentido…lleno de belleza.

    en nuestra vieja cama comunitaria
    a mirar las estrellas fugaces
    a través de los orificios en el techo… y aun así se les ve felices…

    Saludos desde el Mediterráneo inundado de sol

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  7. El desprotegido económico no siempre es el más desprotegido, no?
    Hay felicidades que no se compran. Las estrellas fugaces que se ven desde lechos compartidos, por ejemplo.

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  8. Esperanza...ese toque de la vida en tristes realidades, "...mirar las estrellas fugaces
    a través de los orificios en el techo." Ha sido un placer leerte.

    Saludos, Ian.

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  9. Hola Ian encontré tu blog por medio del de SuSana , te saludo desde Buenos Aires Argentina, muy lindo poema te felicito.

    Saludos

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  10. Queridas amigas, Meulén, Cecy, Malena, Sneyder, Luna, Romi. Les agradezco desde el fondo de mi corazón sus visitas y sus profundas palabras y opiniones.

    Creo que estamos de acuerdo en que la realidad de los más desposeídos del mundo es alarmante.

    Para que mi idea en torno al poema quede aún más clara quiero que lean el siguiente estracto de otro poema mío titulado ÉXODO:

    Y se van por los caminos de las soledades
    las silenciosas almas de la miseria
    expulsados de su tierra sagrada
    por el omnipotente déspota de turno.

    Y caminan en busca de un sueño humilde
    techo, un arbol, semillas y tierra
    un minúsculo trozo del planeta
    donde poder hacer germinar una vez más
    las verdes quimeras y el pan de maiz.

    Besos y abrazos desde Copenhague la ciudad de los cisnes y sirenas,

    Ian.

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  11. Afortunado es aquel que sabe descubrir azules bajo todo el gris que le aplasta.
    Sin embargo, cuánto trabajo cuesta mantenerse erguidos...

    Abrazos

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  12. Hay profundida y grandiosidad en tu relato, por el se descubre la realidad que afecta a otros que no vemos pero que está a nuestro lado, una entrada que da mucho para pensar, gracias Iam
    Un abrazo
    Stella

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