jueves, 13 de diciembre de 2012

DE AMORES Y DE BESTIAS

Dibujo de Ian Welden, Valby, Copenhague ©

Queridas amistades, este cuento fue rechazado por revistas virtuales su extensión. En realidad fue censurado por sus pasajes eróticos. La revista que tuvo la valentía de publicarlo fue: REVISTA ARENA Y CAL ESPAÑA.
L@s invito a juzgar por ustedes mism@s.  Ian.

DOMINGO
Me atacó con un revólver... Se lo quité... Estoy aquí con mis peores pesadillas. Mi sueño de tenerla para siempre está hecho escombros en el suelo de la cocina.  La he destruido. Espero a la policía.

SÁBADO
Su brutalidad me asusta. Se desnudó y se metió a mi cama como  fiera en celo. Se sació y encendió un cigarrillo. Ya no era mi amada, era una hembra hermosa, nada más. Se lo increpé y se rió. Me llamó "niñito estúpido"; "ingenuo" y  me abofeteó.  Salió a la calle, con sus ropas bajo un brazo, "Además, él es mucho mejor que tú en la cama!"

VIERNES A MEDIANOCHE
"Mi marido se enteró", dijo, con un guiño pícaro, mientras succionaba un tomate de la ensalada.
"Pero, ¿ cómo?", le pregunté. No pude creer que esta mujer era la angelical niñita que conocí hace menos de una semana.
"Yo le conté" 
"¡Pero para qué! ¿Por qué? No te entiendo...explícame por favor..."
¿"Por qué? ¿Para qué? y rió a carcajadas.  Vendrá a matarte uno de estos días, cuídate. ¿Vamos?" volvió a reír  y se puso su abrigo.
Caminamos despacio por la calles húmedas. Ella cantaba Im` Singing in the Rain. Me atormentaba su metamorfosis. No es que le tuviera miedo a su marido, éso me tenía sin cuidado. Sin explicaciones me dejó solo en la mitad de la calle.

JUEVES
Nos besamos a la entrada del metro.
Caminamos hasta la playa y entramos al agua. Hicimos el amor de una forma violenta para mí. Luego de secarnos, desayunamos con champaña
¿Por qué no nos casamos?" me preguntó. 
"¿Casarnos? ¿Por qué precipitarnos? Apenas nos conocimos el lunes... además,  ya estás casada".
"Me divorcio. Estoy hastiada de él".
 La playa estaba desierta y el amanecer se nos vino encima.
"Además, con él el sexo es una rutina exasperante" y eructó.
Yo guardé silencio, no había pensado en ese sexo. Recordé que el martes me dijo que eso ya había terminado. Además, la forma descarada en que eructó me dejó  sorprendido. Me dormí y al despertar ya no estaba. La busqué entre las rocas y la encontré bajo el muelle. Cantaba como una niñita; me enterneció.

JUEVES EN LA TARDE
Quedó de llegar a las ocho pero faltaba una hora aún. Tendido en mi sillón, me sentía  muy afortunado por tocarla.y poseerla.¡Dios mío, qué regalo me has dado! Estoy enamorado y soy muy feliz, pensé. 

JUEVES EN LA NOCHE Y MADRUGADA DEL MIÉRCOLES
Hicimos el amor varias veces. Fue nuestro regalo de cumpledías, me dijo.
Cenamos y luego conversamos el resto de la noche.
"Somos dos ángeles, yo una hembra y tú un macho".
"Yo no creo  en ángeles, creo en nosotros, tú mujer y yo hombre ¿Te da miedo?"
"¿Miedo de qué?"
"De ésto".
Sentí un escalofrío bajar desde mi cabeza hasta mi sexo. "Tengo miedo", le dije y ella me abrazó. Temblábamos. "Ésto" era un territorio desconocido para ambos. Y muy grande para administrar por dos simples seres humanos. También se lo dije. Lloramos y nos quedamos dormidos cuando  amanecía.

MIÉRCOLES
Desperté y ella se estaba vistiendo. Iba al trabajo con retraso.  Desde mi cama  me pareció una mujer madura y vivida. Me lanzó un beso con la mano y yo me puse a escribir esto. El resto del día me lo pasé divagando y esperándola. Escribí un poema que aún debo revisar.

MIÉRCOLES EN LA TARDE
Por teléfono dijo que me amaba con locura y temía perderme... Yo la tranquilicé como pude y fui a buscarla a su oficina. Sonrió cuando me vio llegar y me abrazó con efusión. Estaba nerviosa y me sugirió salir a caminar por la ciudad.
"Te he extrañado todo el día, embrujada por ti. No he podido concentrarme ni hablar con mis colegas. Él me llamó varias veces para invitarme a comer...."
Esa cosa tabú, "Él", me descompuso. A su marido no lo nombrábamos. "Él" había adquirido una dimensión extraordinaria en nuestras vidas. Era un fantasma que nos espiaba tras las cabinas telefónicas o desde los taxis.
Se tranquilizó. Esta ciudad amada por mí protegía nuestro amor y nos tendía la mano en momentos así. Cruzamos el puente y ya en la isla, bailaba eufórica como siempre. Ya era de noche. Dos sombras cayeron sobre nosotros. Una me abofeteó y tiró la suelo. La otra, la besó y manoseó descaradamente. Sin decir una palabra, mientras reían, desaparecieron en la oscuridad. Me levanté y la abracé. Extrañamente, ella también reía. 

MIÉRCOLES EN LA NOCHE
Ya en mi casa la consolé como pude. Como amante, como amigo y como padre. Estaba fuera de sí, lloraba y reía simultáneamente.Cuando  se calmó me abrazó y nos quedamos dormidos. Horas después, al despertar, aseguró que no había sido "Él". Que él no tenía idea de nosotros dos.

MARTES
Corrió hacia mí y de un salto aterrizó en mis brazos. 
"Dios mío, cómo te he echado de menos, mi amor".
"Yo también! ¿Estaremos soñando?"
"Soñemos hasta la muerte"
"Sí, mi amor! Hasta la muerte!".
Lloramos de alegría  en la mitad de la calle. Ella gritó que me amaba y los transeúntes sonrieron con nosotros. El planeta entero sonreía. Éramos felices. Corrimos a mi casa locos de deseo y nos amamos el día entero.
Jamás había disfrutado tanto con una mujer. Con su apetito sexual y su ternura al terminar el día estábamos exhaustos. Comenzó entonces una fiesta de comida y vino tinto.  A las dos de la madrugada cuando la llevé borracha a su casa, divisé la figura de su marido en una ventana.
Antes de entrar a su casa me dijo que no me preocupara por él; que ya ni siquiera se tocaban.
Lo importante del día fue que algo que excede los términos naturales nos reunió en una orgía de gozo. Y todo esto en unas pocas horas.

LUNES
Me dirigía a mi casa al mediodía cuando divisé a una mujer maravillosa. Su forma de caminar me produjo ternura y una erección.
"Te mereces un abrazo y un beso, hombre lindo..."
Nos besamos y a los pocos minutos hicimos el amor en mi cama. 
Y a las pocas horas, enamorados, nos contábamos nuestros secretos más íntimos. Este fue el milagro de ese lunes. Tenía que juntarse con su esposo y quedamos de vernos el martes.

Dos gaviotas volaron sobre mi riendo a carcajadas.


Publicado poe  REVISTA ARENA Y CAL ESPAÑA.

3 comentarios:

  1. Que no te importen las opiniones de los mojigatos, Ían. Tu cuento es maravilloso, excelentemente escrito y las escenas eróticas son dignas de Don Juan.
    Te felicito y te admiro.
    Sylvia.

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  2. Es un relato muy especial, muy cruento y desdichado como la vida a veces se presenta para muchos, amigo Ian; a veces el sexo es tan peersuasivo para las personas que se confunden, me gusto la historia, me gustan estas historia que empiezan al reves...

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  3. Hola mi estimado amigo! La verdad es que me ha entretenido mucho tu historia. Te confieso que no soy de leer historias tan largas en los blog porque la vista se me cansa demasiado entre líneas que me resultan interminables... pero en este caso leo y leo y se me hace corto el relato porque es tan cercano, tan real que me agrada de principio a fin. ¡¡El poema merece post aparte!! Dicen que en asuntos amorosos tres son multitud, y pucha que es cierto!! jaja Recibe un cariñoso abrazo que viaja a través de este espacio desde mi Rancagua hasta tu Copenhague!!

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